Tu branding es más que un logo, los colores o la tipografía que vas a usar en tu página, es la manera en la que te vas a presentar al mundo con tu idea de negocio y el comercial 24/7 que hará el proceso de venta por ti. Son los valores que tienes, el tono de voz que usas y la experiencia que compartes a través de todo tu contenido. 

Pero sobretodo, el branding de tu marca es la percepción que tiene tu cliente de ti y por ello es importante cuidar cómo queremos que nos perciban.

Pero para tener el resultado que esperas hay que cuidar cada detalle y transmitir exactamente el mensaje que quieres hacer llegar a los demás. Es importante lograr que la esencia de tu marca llegue a su público y siembres esa primera semilla que hará que los demás se fijen en tu marca y quieran adquirir tus productos o servicios. Yo tengo mi propio proceso de diseño de identidad y es un sistema que personalmente aplico con todos mis clientes para asegurarme de tener todo bajo control y crear un buen storytelling visual.  Al fin de cuentas, todo entra por los ojos. 

¿Qué vamos a hacer? Te voy a contar cuáles son los pasos que siempre tengo en cuenta cuando me encargo de crear la identidad de una marca de principio a fin. Porque sí: un diseño intencionado es una parte fundamental en cualquier estrategia de marketing online y off-line. 

Mi proceso de diseño de identidad corporativa lo divido en 4 fases: 

• La investigación.
• El diseño e implementación.
• La puesta a punto de la marca.
• El gran lanzamiento. 

Pero para que lo entiendas mejor, veámoslo paso a paso. ¿Empezamos?

Llamada de descubrimiento: una herramienta para conocernos y orientarte sobre tu marca

Cuando un potencial cliente me contacta normalmente lo hace a través del email, pero no soy de enviar un presupuesto así sin más porque cada proyecto es diferente y cada marca tiene sus propias necesidades. Por ello, me parece fundamental realizar una llamada de descubrimiento para conocer realmente quién es la persona detrás de la marca y cuales son su necesidades reales. Si no sabes de qué se trata, básicamente es una conversación bidireccional en la que el posible cliente me habla un poco de su proyecto, sus expectativas y las necesidades de su marca, para posteriormente yo decirle cómo le puedo ayudar antes de enviarle un presupuesto personalizado de acuerdo a su situación actual. 

En esta llamada el potencial cliente tiene la oportunidad de conocerme, contarme sus necesidades, y yo tengo la oportunidad de darle mi visión, mostrarles cómo trabajo y explicarle en detalle cómo funciona todo.

Una vez terminada la llamada de descubrimiento, organizo el presupuesto teniendo en cuenta todo lo que hablamos, incluyendo el contrato para que ambas partes tengamos todo claro y en regla. Si le gusta y es adecuado a su propio presupuesto, puede aprobarlo y firmarlo. Al cabo de 24hr tendrá acceso al panel de cliente.

El panel de cliente es nuestro campamento base. Es una zona segura donde encontrarás toda la información relativa a tu proyecto: cuestionarios, carpetas de trabajo, copia del contrato, información para elegir hosting, reservar sesiones (en caso de ser necesario), entre otras cosas.

Esto es muy útil, ya que los clientes tienen todo en un mismo lugar. Lo que les facilita la vida a ellos al momento de rellenar la información que necesito y a mí a la hora de tomar esa información y empezar a hacer mi trabajo.

Investigación, investigación y más investigación

Me gusta darle a todos mis procesos de diseño de idnetidad un enfoque holístico que me permita entender realmente cuál es la historia que mi cliente quiere contar a través de su marca. Por eso, dedico varios días al proceso de investigación, que para mí es uno de los más importantes. Mi proceso creativo en el diseño estaría incompleto sin este paso.

Aquí me enfoco en entender quién es realmente mi cliente, cuáles son sus gustos e intereses personales, cuál es la motivación y la personalidad de su marca y, por supuesto, analizo a la competencia, ya que no queremos repetir nada que ya esté en internet. 

Pero sobretodo me enfoco en entender a su cliente, creo que el diseño está al servicio de las marcas, pero sobretodo existe para ayudarnos a atraer a nuestros potenciales clientes. Si no lo estudiamos y descubrimos cómo se mueven, no podremos crear un diseño que realmente los cautive.

Para saber cómo diferenciarnos tenemos que revisar mucho: ver qué está haciendo tu competencia, qué lugares frecuenta tu cliente y qué lugares frecuentas tú. Yo analizo todo, desde el diseño hasta la experiencia de usuario. Me fijo mucho en las personalidad de marca, los tipo de arquitectura  web, las palabras claves que está posicionando, y lo que transmiten a nivel visual.

Esto me ayudará a entender qué tipo de marcas y páginas gustan, según tu nicho, y cómo podemos potenciar tu branding y tu web para diferenciarte de lo que ya existe en Internet, pero sobretodo para atraer a tu público.

Con la investigación hecha, doy paso a la segunda fase de mi proceso creativo:

Mi proceso de diseño de identidad de marca: de la idea a tu branding definitivo

Antes de comenzar a diseñar la que será tu marca es importante definir cuál es el estilo que le daremos a la misma. En la fase de investigación he descubierto cosas relacionadas con tu marca, tu sector, tu competencia y tu cliente y esto es mi base para comenzar a trabajar en tu proyecto y determinar cuáles son los valores primarios que forman parte de la personalidad de tu marca y el estilo de dicha personalidad.

Para saber cómo diferenciarnos tenemos que revisar qué está haciendo tu competencia. En el caso del diseño, cómo es la experiencia de usuario y su parte visual. Por eso, me fijo mucho en qué tipo de arquitectura tiene la web, cuántas categorías tiene en el menú, las palabras claves que está posicionando, y lo que transmiten a nivel visual.

Esto me ayudará a entender qué tipo de páginas gustan, según tu nicho, y cómo podemos potenciar tu web para diferenciarte de lo que ya existe en Internet.

El Mood Board creativo de tu marca

El Mood Board, que en español significa “tabla de estado de ánimo” o también conocido como “tablero de inspiración de marca”, es una herramienta visual que nos ayuda a entender los conceptos básicos de nuestra marca a través de un collage con diferentes imágenes que representan el estilo de la personalidad de la marca.

¿Por qué es importante el Mood Board dentro de mi proceso de diseño de identidad? Porque me permite comunicar mejor la idea de diseño que mejor representa a la marca en concreto y puede ayudarle a alcanzar sus objetivos y transmitir realmente sus valores. Pero sobretodo, me ayuda a que mi cliente pueda también entenderlo. En general, es una buena herramienta para entender mejor el mood de la marca y lo que quiere conseguir.

La pregunta que siempre hago en este paso es, ¿Sientes que esta colección de imágenes, texturas y colores transmiten la personalidad de tu marca? 

Si la respuesta es sí, pasamos al siguiente paso…

Del boceto a la propuesta de diseño de identidad

Con esto claro, es hora de pasar a la acción cuando de identidad visual corporativa se trata y entrar en el núcleo central de mi proceso de diseño de identidad. 

Empiezo bocetando en papel ideas y conceptos antes de pasar al programa de diseño. Un color por aquí, otro por allá, un trazo que se convierte en logo, y un logo del que salen algunas variaciones que puedes utilizar en tu branding. 

Me gusta pensar que no sólo estoy trabajando un logo sino tu identidad visual. Todos los ingredientes que forman parte del nacimiento de tu marca.

Yo trabajo con un sistema conocido en el mundo anglosajón como “Once concept”, ¿Que significa esto? Pues que hago muchas pruebas, muchos pero muchos bocetos, muchos twist y ajustes y solo cuando estoy segura de que el diseño realmente recoge todo lo que necesitamos que transmita, presento un único diseño a mi cliente. 

Da un poco de miedo al inicio, pero la realidad es que con el tiempo crea menos confusión porque vamos en una dirección clara. Por eso es tan importante que el moodboard esté alineado con tu marca, que sientas que realmente tiene todos los elementos que la identifican y que cuando lo miras comunica tu mensaje, habla con la voz de marca, dice quién es y crea esa conexión con tu cliente.

Cuando hago la presentación de mi propuesta de identidad corporativa gráfica, me gusta hacer una presentación en vídeo grabándome a mí y a mi pantalla, donde tengo abierta la presentación que adjunto a mi cliente o la web, para explicarle por qué elegí cada cosa, cuál es el porqué de cada uno de los elementos dentro del diseño y su razón de ser. 

La experiencia me ha enseñado que ésto reduce significativamente los problemas de comunicación y este es uno de los elementos a los que le doy mayor importancia. La comunicación cercana y el trabajo en equipo con mi cliente siempre ha sido mi prioridad. Por eso doy muchísima importancia a esta fase e intento que la comunicación sea clara y con un lenguaje amigable.

Porque, seamos sinceros, tú no eres ni quieres ser un diseñador, pero conoces tu marca y quieres estar seguro de que el diseño te ayude a alcanzar tus objetivos y entenderlo es un elemento fundamental.

Refinement o puesta a punto de tu identidad de marca

Una vez entregada mi propuesta pasamos a la fase de puesta a punto. Aquí iniciamos una serie de feedbacks de revisión y comenzamos a pulir los detalles del diseño. 

Algunos diseños no están listos a la primera, algo bastante frecuente, por ello en esta fase es importante el feedback del cliente. Nuestro objetivo será perfilar todos los detalles y poner a punto tu marca para que se adapte 100% a tu estrategia y a los objetivos que quieres cumplir.

No tengo un limite de revisión porque, por lo general, una marca está lista en la tercera o cuarta ronda. Cuando todo está perfecto paso a completar la guía de marca que viene incluida en tu carpeta de marca.

Guía de marca: tu elemento de referencia para cuidar tu branding a largo plazo

La guía de marca son esos estándares de identidad corporativa que todos los proyectos deberían tener. Hablamos de la guía de estilo que incluirá información básica del negocio: la misión, visión, valores y personalidad; el tono de marca, el uso del logotipo según tamaños y variaciones, la paleta de colores, las tipografías de marca, el estilo de las imágenes, tarjetas de presentación, entre otras cosas. Es decir, la comunicación visual y verbal de tu marca.

Esta guía es muy importante porque puedes volver a ella cada vez que sientas que estás perdiendo el norte con respecto a tu marca, o cada vez que quieras empezar a delegar con un profesional algunos aspectos de tu comunicación.

Ten en cuenta que no es un elemento estático, sino en constante evolución, y que puedes completar con el paso del tiempo con otro tipo de elementos como, por ejemplo, la guía verbal de tu marca para cuando trabajes con un copywriter, la guía fotográfica por si necesitas delegar en fotógrafos, o incluso crear un apartado con  la guía sensorial de tu marca. ¿Interesante, no?

Con la guía lista, preparo la carpeta de marca y hago la exportación de todos los archivos, logos y elementos y procedo a su organización. En este artículo te  hablo más en detalle sobre cómo se organizan los archivos de una marca

¿Te habías puesto a pensar en todo lo que hay detrás de un proceso de diseño de identidad corporativa? Espero que mi proceso creativo en el diseño te haya dado una idea más profunda de cómo sería trabajar conmigo o hacer tu propio workflow si también eres diseñador. 

Cuéntame en los comentarios cómo es tu proceso creativo y si se parece en algo al mío ¿Lo imaginabas asi?