El hombre siempre ha sentido la necesidad de contar historias para transmitir sus conocimientos y traspasarlos en el tiempo o por el puro placer de entretener. Es un instinto primordial que se remonta a los albores del tiempo. Ahora, a pesar de que es una práctica o técnica muy antigua sigue vigente hoy en día. ¿La razón? refuerza los conceptos pues hace uso de las emociones para generar un mayor impacto.

Las imágenes siempre cuentan una historia, ya sean imagenes fijas o en movimiento, porque tienen el poder de generar una impresión duradera en la audiencia. Si la imagen es capaz de generar una emoción potente, entonces se quedara en la memoria por más tiempo.

Esta es la base desde la que comenzamos todos aquellos que queremos trabajar una marca (personal o no) a través del storytelling visual. Existen muchas maneras de usar el storytelling visual para ayudar a tu marca a destacar, además de muchas herramientas y formatos, peor antes de adentrarnos veamos un poco que es el storytelling.

¿Qué es el storytelling visual?

En general, Storytelling es el arte de contar historias, consiste en narrar una serie de acontecimientos en los que un protagonista debe superar un conflicto siguiendo la estructura clásica del relato (planteamiento, nudo y desenlace)

Estarás pensando en las historias clásicas que has visto y los medios a través de los cuales las has percibido (películas, libros, etc) y tienes toda la razón, eso es tradicionalmente contar una historia Pero puede ser mucho más, aunque hasta ahora no te lo hubieras planteado. Se pueden contar todo tipo de historias, pero en particular se puede aplicar al branding de tu marca para ayudarte a conectar mejor con tu audiencia. 

Pero antes de adentrarnos tienes que tener claro la distinción entre una campaña concreta de storytelling visual para un producto o servicio y el storytelling visual propio de una marca, ese del día a día, que trabajas todo el año. ¿Se entiende?

Una cosa es lanzar un producto o servicio, como podría ser una retiro espiritual de 3 días en los pirineos, y hacerlo con una campaña de video storytelling y otra cosa es comunicar día a día tu marca en su cuenta de Instagram o en TikTok.

Cuando se trata de una marca hay que ser consistentes e insistentes, aprovechar toda oportunidad para crear la impresión adecuada en la audiencia, puedes usar los recursos visuales (elementos de diseño, fotografías, infografías, vídeos, etcétera) para transmitir los valores de tu marca de manera constante, coherente y eficaz con ese objetivo: crear una impresión duradera.

Todos tenemos una historia que contar, pero recordamos solo aquellas historias que nos emocionan. Este es mi mantra, y debería ser también el tuyo si estás construyendo una marca.

5 claves para crear una marca con un storytelling visual memorable

Si no emocionas con tu marca, no existes. Tu marca no es solo un nombre, es lo que tu audiencia recuerda de ella. Va más allá del logotipo, son los sentimientos que consigue producir en tu audiencia cuando interactúa con tu negocio. Por esto, y alguna cosa más, es necesario trabajar un storytelling visual coherente con tu marca.

1. Tenemos una solo oportunidad para crear una buena primera impresión: APROVECHALA, No la desperdicies.

Utiliza imágenes de impacto, que cautiven a tu audiencia a primera vista. Si entras a una web bonita y fácil de navegar seguro te quedarás, pero si las fotografías de esa web están cuidadas y transmiten el mensaje de la marca te atraparan, te lo aseguro.

Si entras en una cuenta de Instagram con una imagen agradable y coherente seguro la seguirás. Si entras en un canal de YouTube con una imagen cuidada e intencional le darás a seguir. Podría seguir hasta el infinito con más ejemplos, pero creo que se entiende ¿no?

Tienes que cuidar los detalles, porque tu audiencia podría entrar en contacto con tu marca desde cualquier canal de comunicación no solo desde tu web. Podrían visitar tus redes, recibir tu tarjeta de visita, ver una publicación donde se hable de tu marca o incluso en tu propia tienda física. Tu objetivo es que esa primera impresión sea positiva, para que se quede y quiera saber más de ti por eso el storytelling visual podría ser un gran aliado.

2. Una imagen vale más que mil palabras.

Con esto no digo que las palabras no importan, absolutamente no, pero la verdad es que procesamos las imágenes 60.000 veces más rápido que un texto. Teniendo en cuenta esto, si puedes decir algo con una imagen o con un video breve ¿entonces por qué no hacerlo?

Además el video es el formato del futuro, transmite mucha más cercanía y ayuda a conectar de una manera mucho más potente porque tiene algunos recursos extras como los sonidos.

Un consejo especial: ten siempre en cuenta que cuando hables de tu producto o servicio debes siempre hablar de sus beneficios. Piensa en tu cliente y muéstrale lo que obtendrá al comprar.

3. El corazón de tu historia: tu mensaje

Cada vez que crees contenido tienes que centrarte en el mensaje que quieres transmitir. Tu mensaje debe en todo momento llamar la atención de tu audiencia, por ello es importante que antes de crear algo, te preguntes: ¿Cuál es la moraleja de mi historia? ¿Qué quiero que recuerden? Tu objetivo es que tu audiencia se implique más con tu marca, es por ello que te recomiendo que intentes siempre que reflexionen y se hagan preguntas.

Imagina que tu marca es sobre biocosmética, podrías hacerlos reflexionar sobre la importancia del packaging biodegradable y por qué elegiste el tuyo, hablando sobre algo así no solo los estás educando, sino que además confiaran más en ti. Pero es que además podrías hablar sobre ello mostrando detalles sobre el empaque, mostrando el productor del empaque, el cultivador de la materia prima, etc etc… ¿Se entiende?

4. El Obstáculo a superar

Nuestros potenciales clientes se sienten atraídos por nuestra marca, por la misma razón que los héroes son colocados en las historias: quieren resolver un problema que, de una manera u otra, está destruyendo su pacífica vida. Nuestros clientes tienen un problema y están buscando una solución. 

Si eres un fotógrafo de bodas, tus clientes vienen a ti porque quieren conservar las memorias de uno de sus días más importantes, pero sobre todo de esos momentos claves. Enséñales el problema y llega al clímax de la historia: muestra cómo tu persona alcanza su objetivo, muéstrale lo que puede conseguir. Es allí, en ese momento donde aprovechas a recurrir a tu llamada a la acción.

Por ejemplo, La felicidad que le dará esa blusa o collar nuevo cuando se lo pongan, muestra como se sentiría segura de si con ella. Si tu producto o servicio, es una respuesta a su problema, identifícate con su situación y cómo le darás solución.

5. El protagonista de tu historia

No es tu producto, no es tu servicio. El protagonista de tu historia eres tú, pero sobre todo lo es tu cliente. Para hacerlo sentir protagonista deberías contar tus historias desde un punto de vista personal, que lo haga sentirse identificado. No se trata de contar cualquier cosa, se trata de contar historias relacionadas con tu público objetivo y sus problemas, o lo que le produce alegría satisfacción, alivio.

Puedes aprovechar y contar la historia de tus clientes, esas historias de suceso y que son un claro de ejemplo de como conseguir resultados. Puedes grabar testimonios en videos y mostrarlos, decirles a tus clientes que cuenten como era su situación antes de trabajar contigo y como ha sido luego de conocerte. Cuenta esa transformación y te prometo que conectaras a un nivel más profundo.

¿Te ha gustado? Espero que si. Mi lugar preferido para contar pequeñas grandes historias visuales es instagram, pero realmente hay muchos otros lugares donde se puede aplicar el storytelling visual o eld e toda la vida…